El inicio de la dispersión es tener más de una cosa de cada categoría (ya sea en el trabajo, en casa o en tus hobbies).
Empiezas a ramificarte.
Si estás leyendo un libro, acaba con él antes de meterte a leer otro. En caso contrario, tendrás dos procesos abiertos y tienes que poner el foco en atender los dos para cerrarlos. Se complica un poco la historia.